Morlac supone un cómic fuera de todo orden mental preestablecido, en el encontraréis una narración distinta a todas las conocidas anteriormente, mediante un esquema de lectura, en el que juegan un papel fundamental las viñetas, con la posibilidad de escogerse aleatoriamente, determinando así, la historia final del hombre del bombín y su maleta. De tu acierto depende el protagonista llegue a buen puerto al final de la historia.
Salvando las distancias, me recuerda éste tipo de historias, a aquellos libros que tuvieron tanto éxito de Timun Mas, de ¡Elige tu aventura!, de los 80, donde según elegías la página, te llevaba a un destino y un final diferente. En el caso de Morlac, de Diábolo Ediciones, supone algo parecido, pero con la peculiaridad, que el protagonista y el lector una vez introducidos en materia, pueden verse en una historia que comienza una y otra vez, sin final, a no ser que te equivoques eligiendo la aventura, caso de un ninja, un monstruo, el paso por una tubería u otro espécimen que pase por su camino.
Leif Tande (1969, Stavanger, Noruega), es un autor afincado en Cap-Rouge (Canadá), que antes de dedicarse al mundo del tebeo, fue soplador de vidrio, montando una tienda que apenas le duro 4 años; tras declararse en bancarrota y escapar de sus acreedores, marcha a América en busca de una nueva oportunidad de vida en compañía de su mujer, hasta que ésta, decide abandonarle, hundiendole en el alcoholismo y una cirrosis crónica. Afortunadamente se recupera parcialmente y le ganamos para el medio del arte secuencial, con obra como ésta y otras como El Pulpo: Disk hockey de Bang Ediciones.
La lectura de ésta obra supone un esfuerzo bastante importante, tanto en su comprensión como en el seguimiento de las posibles historias, en definitiva un nuevo planteamiento del tebeo, en el que Leif Tande ha hecho una apuesta fuerte y bastante original.
Morlac
Guión y dibujos: Leif Tande
Editorial: Diábolo Ediciones
Formato: rústica con solapas, 21 x 27 cms.
152 Páginas, b/n, 16
Valoración: ***