La aparición de una nueva editorial como Dibbuks, a cargo de Ricardo Esteban (alias Kaito, guionista, dibujante, y faneditor de Albanta en los 80) se une a la palestra de la edición en éste difícil mundo editorial de los cómics. Tras las novedades aparecidas en el Salón de Barcelona, llega El Perdición un a ventura de piratas protagonizada por la joven Claudine y el chino Tamagura, pronto se verán envueltos en toda una disputa por un tesoro de oro en el mar del caribe, que casualmente ella esconde el mapa tatuado en su espalda. En medio de todo, dos piratas enfrentados por el oro, el capitán Kraken al mando de la nave El Perdición, por el que tomará partido la protagonista, y Alessandros el rival más temido del mar, que antiguamente fuera su socio. Abordajes de navíos, pillerías, venganzas y muertes por doquier, es lo que encontraremos en éste primer volumen, realizado por dos autores de la talla de Carlos Puerta y Lorenzo Díaz.
El álbum que cuenta con unos dibujos espléndidos de Puerta, con una gran versatilidad gráfica en la paleta de colores, con un pequeño pero, la reproducción de los personajes por el color aplicado, son en ocasiones demasiado oscuros. Un dibujante qué es bien conocido por ser el autor de las portadas de realizadas de las novelas de El Capitán Alatriste de Arturo Pérez Reverte. En cuanto al guión de Díaz conocido por todos por sus traducciones de cómics superhéroes, articulista, y escritor de varios libros sobre este mundillo del noveno arte; ya había colaborado anteriormente con Carlos en trabajos como Tierra de nadie, Eustaquio Fariñas o Cuentos de Marita por citar algunos ejemplos. En ésta nueva colaboración, nos narra una interesante historia de aventuras de piratas, de lo más entretenida, que seguramente continuará en próximas entregas.
El Perdición, abre un camino a la aventura de piratas, en un terreno poco explorado en la actualidad, un género que esperemos que tenga éxito y los veamos surcar los mares.
El Perdición T. 1, Los cañones de oro
Guión: Lorenzo Díaz
Dibujos y color: Carlos Puerta
Editorial: Dibbuks
Formato: cartoné, 24 x 32 cms.
48 Páginas, 15
Valoración: ***
Excelente historia a cargo de Sergio Meliá, un autor de corte clásico en la línea clara, que me ha sorprendido muy gratamente con una historia de amor y desencuentro. Sus dos protagonistas, Marcos y Gloria, tras muchos años sin verse, desde el mismísimo colegio, se reencuentran en un café, él nunca había podido declararle su amor por timidez y lo había dejado arrinconado en su memoria hasta ese día, en que se ven. Pasaran una noche de locura, haciendo el amor hasta altas horas de la madrugada, pero la suerte del chico se ve truncada de nuevo, Gloria desaparece sin dejar rastro, hasta tres meses después de la fecha, en que recibe Marcos, su llamada desesperada para que la recoja nada menos que desde Shangai. Iniciando de nuevo una relación desde cero, con sus altibajos económicos, él como escritor no tiene una solvencia monetaria desahogada, con lo que pone a la muchacha en un aprieto, anteponiendo su amor, decide tomar una decisión que puedes cambiarles su vida. Otra de los protagonistas importantes del álbum es Paola, la vecina de escalera, una gran amiga de Marcos, buena consejera para los momentos importantes, que tendrá un papel muy relevante en toda ésta historia.
Una Buhardilla en Paris es una historia ambientada en la Francia de los años 50, fresca, llena de vida, donde el amor prevalece sobre todas las cosas, con un final inesperado. Una de las historias mejor contadas, sobre el tema que trata (tendréis que leerlo), dibujada de forma sublime por un autor brillante (los más viejos del lugar le recordarán, por entintar a Salvador Larroca en sus inicios en Marvel y su Motorista Fantasma) que pienso seguir muy de cerca en sus próximos trabajos. ¡No os lo perdáis!
Una Buhardilla en París
Guión, dibujos y color: Sergio Meliá
Editorial: Dibbuks
Formato: cartoné, 24 x 32 cms.
52 Páginas, 15
Valoración: ****
Enigmática obra protagonizada por el joven químico holandés Cornell y su novia Magriette en plena época de caza de brujerías. Harto él de la universidad, por no poder explorar los caminos de la ciencia según sus criterios, decide aceptar la oferta de un laboratorio, con un encargo muy especial, buscar el elixir de la eterna juventud, abandonando a la muchacha, hasta no se sabe cuando. En ese preciso momento, ella recibe la visita inesperada de un intendente, que le propone que le acompañe a su casa, con no pocas palabras para convencerla y presentarle a su señor, un poderoso mercader que había viajado hasta China en busca de fortuna, donde conoció a una mujer que era parecidísima a la que le acababan de presentar. Un ser deforme que se enamora perdidamente de la muchacha, sin ser correspondido; ella no será capaz de salir de la casa sin pasar por un Gabinete Chino, donde queda prendada de cosas realmente sorprendentes e imágenes de acontecimientos muy relacionados con su amor. Un relato inspirado libremente en La Bella y la Bestia, en una Holanda del siglo XVI, en un momento de cambio entre la Edad Media y el Renacimiento, con un final un tanto poético.
Nancy Peña realiza nos narra un historia original, con momentos muy interesantes, pero que en el desarrollo de la trama el lector, se puede ver confundido ante tal propuesta en el guión; con unos personajes que aparecen como seres atormentados, que rozan la locura. Artísticamente la obra es de una impecable factura y del agrado de mis gustos gráficos, pero quizá no convenza a todo el mundo por igual en todos sus conceptos.
El Gabinete Chino
Guión y dibujos: Nancy Peña
Editorial: Dibbuks
Formato: rústica con solapas, 19 x 265 cms.
96 Páginas, b/n, 14
Valoración: ** ½
Escrito por JAMESON a las 11 de Noviembre 2005 a las 03:41 AM